Vivimos conectados la mayor parte de nuestro día a la tecnología, ya sea por trabajo o por entretenimiento, y muchas veces nos olvidamos de conectar con nuestro ser. Me refiero, a permitirnos un momento de silencio con nosotros mismos diariamente, sin distracciones, para escuchar lo que nuestro cuerpo físico, y/o nuestro corazón tienen que decirnos y atender nuestras necesidades. El cuerpo nos habla por medio de síntomas, por ejemplo, un constante dolor de cabeza que quizás comenzó por el exceso de trabajo y la falta de descanso, episodios de ansiedad como consecuencia de una relación toxica, problemas digestivos a causa de querer controlar lo que no se puede. Todas son señales que el cuerpo nos envía advirtiendo que debemos parar, respirar y reevaluar lo que está ocurriendo en nuestra vida. Lamentablemente muchas veces ignoramos estas señales y comenzamos a tratar el síntoma y no la causa del síntoma, simplemente porque no vivimos en sintonía con nuestro cuerpo, no tomamos el tiempo para evaluar nuestras emociones, nuestro estado mental, nuestro espíritu, y la manera en que estamos alimentando a cada uno de ellos. Nuestro corazón también nos habla por medio de la intuición, que también muchas veces ignoramos cuando nuestra mente no está alineada con el corazón o cuando nuestra vida está desequilibrada.
Separar al menos 30 minutos diarios para estar en paz con nosotros mismos y conectar profundamente con nuestro ser, es un acto de amor hacia nuestra persona. Poder escuchar y respetar las señales que nos envía nuestro cuerpo a tiempo podría evitarnos diagnósticos de salud no tan deseables en el futuro. Consultar nuestro corazón más a menudo, puede ayudarnos a tomar mejores decisiones para nuestra vida y a encaminarnos en el camino correcto.
Si yo hubiera conocido antes lo poderosa que es esta conexión con nuestro interior, seguro hubiera podido reconocer a tiempo que mi estilo de vida en “flight and fight mode”, no era saludable, y que el cuerpo llevaba tiempo enviándome esas señales de advertencia hasta que no pudo más. Afortunadamente, pude aprender la lección, y esta práctica de conectar, evaluar mi cuerpo, escuchar mi interior constantemente es una de las herramientas que me ha ayudado a mantenerme en buen estado físico, emocional y mental por cerca de 6 años sin medicamentos. Incorporar esta rutina diaria es de gran beneficio, y como dije anteriormente, un acto de amor para nosotros mismos. La persona más importante en tu vida eres tú. Para poder disfrutar de una vida plena y feliz y poder ayudar a otros, necesitamos estar bien, y para poder estar bien tenemos que cuidarnos, amarnos y darnos prioridad, el resto, puede esperar un poco.
Greysa Cerpa-Lopez
Digestive Bliss-Founder